martes, 2 de julio de 2013

Amores



En el estado melancólico que parece acompañarme el día de hoy, he decidido dedicarle este espacio a recordar los amores que he llegado a conocer en mis 27 años de existencia, quizás mi repertorio sea escaso a comparación de muchos y muy probablemente ninguno de los involucrados lea estas líneas, sin embargo no importa ya que esto es solo una manera de reminiscencia de mi parte.

¿Quién posiblemente ha logrado olvidar su primer amor? ¿O su primer beso? Sé que yo no, ese primer momento incomodo donde no sabes exactamente que decir o hacer y simplemente sigues el impulso que te llevo hasta ahí. Se dice que el primer amor no está hecho para perdurar, sé que en mi caso es cierto ya que de aquel breve romance solo me queda el recuerdo de tres días. Todo es color rosa, todo es lindo y el simple hecho de escucharle es suficiente para poner una sonrisa en tu cara, las mariposas revolotean en tu estómago y te dan ganas de golpear a alguien (bueno, quizás no a todo el mundo le suceda esto). Sin embargo el primer amor es lo que es, el primero y cuando termina te sientes peor que cuando empezó, porque las mariposas siguen ahí, la sonrisa todavía aparece al escucharlo, pero sabes que no es para ti.

Después descubrí lo que era un amor de ensueño, aquel que creíste que nunca llegaría, que esa persona no voltearía a verte de esa manera sin importar que y por lo tanto no estás del todo segura  de que sea verdad, como cuando te das cuenta de que estas soñando y puedes hacer todo lo que siempre quisiste pero no podías en el mundo real, pero siempre con el miedo constante a despertar y  fue justamente lo que sucedió, despertar del sueño, recuerdos que a lo largo del día empiezas a olvidar, cosas que aunque lo intentas no puedes detallar o siguiera explicar el por qué termino, aunque la respuesta es fácil, porque eso es lo que los sueños hacen, llega el día, despiertas y el sueño termina, no sin la promesa de que llegará otro mejor la noche siguiente. Y antes de dormir te quedas pensando “Quizás vuelva a soñar esta noche”.

 El siguiente fue un amor más realista pero igual de imperfecto, quizás fue por todas esas imperfecciones que ha sido hasta ahora el más duradero, al final de este las mariposas no revoloteaban tan fuerte, la sonrisa no llegaba tan fácil y la sensación de ensueño se perdió, sin embargo me llenaba de una sensación de confianza que no había sentido antes, cuando conoces los defectos de alguien sabes que esperar, dejas que conozcan tus fallas y te dejas ver vulnerable ante alguien, quieres saberlo todo de la persona y a la vez deseas que tengan el mayor conocimiento sobre ti, metas a futuro, confianza, comunicación y respeto fueron la base para este amor, sin embargo el tiempo es cruel y conocer a fondo a una persona siempre es un arma de doble filo, las palabras pueden convertirse en algo más dañino que una daga y el saber que algo no está en la naturaleza de esa persona no hace que dejes de desear que lo estuviera, la separación es amarga, larga y dolorosa. Algunas veces te sientes culpable de extrañarlo, otras sabes que es mejor así  por que tener la certeza de que alguien no es para ti no hace que mágicamente dejes de desear que lo fuera.

Justo en medio del amor anterior conocí otro tipo de amor, un tipo de amor pasional que simplemente te consume y hace que pierdas la mayor parte de la razón, aunque este tipo de amor rara vez es duradero.

Y finalmente esta aquel amor al que nunca se le permitió inclinarse hacia el lado romántico,  aquel que, aunque se cortaran las alas, se negó a desaparecer y termino convirtiéndose en algo más. Otros amores vienen y van, pero este te acompaña a los largo de los años, bajo un nombre menos llamativo pero igual de significativo, cariño transformado en verdadera amistad. Sin importar cuantos años pasen o cuantas otras personas lleguen a tu vida, aquellos que se vuelven amigos de esta manera siempre tendrán un lugar inamovible dentro de ti.   

Ahora me encuentro a la espera, ¿Qué nuevo tipo de amor entrará esta vez por medio de un par de ojos incautos?